Autoridad

 

 En primer lugar, queremos destacar el video de Pink Floyd “Another brick in the wall” , en el cual encontramos la autoridad excesiva que antes predominaba:

 

 

 Respecto a la autoridad se debe tratar desde la infancia; tener autoridad, que no autoritarismo, es básico para la educación de nuestro hijo. Debemos marcar límites y objetivos claros que le permitan diferenciar qué está bien y qué está mal, pero uno de los errores más frecuentes de padres y madres es excederse en la tolerancia. Y entonces empiezan los problemas. Hay que llegar a un equilibrio.

 En cuanto a la autoridad en los centros educativos, es necesaria en su justa medida y aunque se le suele culpar a los padres de esto, los maestros no deben resignarse a que esto es así y nada se puede hacer. Se deben poner normas desde el principio y desde la infancia, ya que cuando el niño se va haciendo mayor y está en niveles de secundaria o mayores es muy difícil lograr que cambie de actitud si nunca antes ha tenido normas, responsabilidades, etc. Por todo esto creo que la violencia en als alulas puede producirse tanto por defecto como por exceso de disciplina autorietaria. Un exceso hace que los alumnos se estén quietos y buenos aparentemente, porque cuando se sueltan, puede ser más grave.

 A modo de conclusión queremos destacar que la autoridad del maestro, tanto en lo que enseña como en el aula, para mantener la disciplina y el orden en un grupo son puntos clave para una buena educación; si la autoridad falta, en cualquiera de las dos partes, se pierde el control de grupo y es cuando la educación peligra.

 Si nosotros, como maestros, preparamos bien nuestra clase y la presentamos de tal modo que sea ágil y comprensible, agradable al alumno, que él sienta el deseo de aprender, participar y atender en la misma... podremos mantener a nuestros alumnos/as cautivos en la clase y con el deseo de recibir la enseñanza y educación.

 Es muy importante darnos cuenta que en nuestras manos tenemos una riqueza muy grande que son los jóvenes, que trabajamos con personas y que de nosotros depende, en gran medida, el que logren desear ser educados.